Recogimos los certificados del curso y de las prácticas laborales. Aprovechamos para realizar las últimas compras, preparar las maletas y despedirnos de las familias.
Seguimos con la rutina de cursos y prácticas laborales. Por la tarde las alumnas tuvieron tiempo libre por el centro. Pudieron ver y leer, los poemas que llenan las calles de Madrid: autores clásicos conviven con versos escritos por los madrileños.
Todas pedimos información y conseguimos llegar a nuestros trabajos y clases a tiempo. En las clases nos han distribuido por niveles y tenemos la oportunidad de conocer a personas de otros países que están también estudiando español. ¡Las prácticas en los trabajos han resultado muy productivas! Podría ser que alguna decidiera quedarse en Madrid. Las que tuvieron un ratito libre entre clase y trabajo pudieron dar un paseito con las profesoras por el centro. Vimos el ayuntamiento y la plaza de Cibeles, la calle Alcalá y la Gran Vía. Lo más bonito de Madrid, hasta ahora es la luz y el cielo tan azul. Madrid no duerme y siempre está lleno de personas por la calle, música y cafés. Algunas tomamos chocolate con churros. Parque del Retiro con la puerta de Alcalá Street Art en Gran Vía Banco de España y la plaza de Cibeles
El lunes fue más llevadero con la idea de ir al teatro por la tarde. Fuimos al Teatro Pavón en Lavapies, que los lunes hace sesión para estudiantes de Liceo. Después de la obra, hubo un coloquio con los actores y el director donde los alumnos/as pudieron preguntar y comentar en relación a lo que habían visto.
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